Cristianismo
- Confesión: cristianismo
Es la religión del Libro que mayor número de seguidores tiene y también la religión mundial con mayor presencia a escala global superando los 2.000 millones de seguidores.
Surgió en Canaán (la zona actual de Israel-Palestina) hace algo menos de dos mil años como consecuencia de la predicación de un profeta judío, Jesús de Nazaret, a quien sus seguidores estiman Dios e hijo de Dios y al que denominan Jesucristo.
Se trata de una religión que deriva del judaísmo y acepta parte del mensaje religioso de esta religión, aunque lo redefine. Si bien es una religión monoteísta y estima que Dios es único, por otra parte, plantea que este tiene tres personas (Padre, Hijo —Jesucristo— y Espíritu Santo). Acepta del judaísmo el Libro sagrado, denominado Antiguo Testamento. Añade una parte específicamente cristiana, denominada Nuevo Testamento, cuyo núcleo central son los Evangelios, que exponen la predicación de Jesús. Ambas partes forman la Biblia cristiana.
El cristianismo plantea un mensaje religioso universalista. Cualquier ser humano puede ser cristiano sin más requerimientos que aquellos de índole religioso, principalmente la aceptación de Jesucristo como divinidad salvífica.
La conversión al cristianismo es un fenómeno común y el cristianismo es una muy eficaz religión misionera. Como las potencias hegemónicas a escala mundial desde el siglo XVI han sido potencias cristianas, el cristianismo ha tenido un enorme auge en los últimos siglos y ha sido la religión con mayor número de seguidores en el mundo desde esa fecha hasta la actualidad.
Sensibilidades cristianas
El cristianismo aparece dividido desde épocas muy antiguas. Se pueden distinguir, sin que ninguna clasificación resulte plenamente satisfactoria, cuatro grandes conjuntos: católicos, ortodoxos y orientales, evangélicos e independientes.
El grupo mayoritario lo forman los católicos, que son alrededor de la mitad de los cristianos del mundo. Los cristianos ortodoxos y orientales se acercan a los 250 millones, los cristianos evangélicos rondan los 800 millones y los independientes, en ocasiones difíciles de diferenciar de los anteriores, se acercan a los 200 millones.
Resulta necesario destacar también una tendencia en el seno del cristianismo que cobra progresivamente mayor presencia como es la conformación de modelos individuales y no afiliados de entender la religión. Las diferencias doctrinales entre las diversas sensibilidades cristianas son grandes. En particular en lo relativo al papel otorgado a los evangelios, a la tradición o a las instituciones de gobierno de las comunidades.
Así en ciertos grupos el papel decisorio central lo tiene la comunidad o congregación. En otros grupos, los notables (ancianos, presbíteros). Los pastores o líderes religiosos comunitarios en algunas comunidades, o bien los líderes de éstos (obispos, arzobispos, patriarcas). También se concentra en una fuerte medida el poder de decisión en una sola persona (por ejemplo, entre los católicos cuyo primado se le reconoce al papa).
Más allá de estas diferencias resultan notables, especialmente en el último medio siglo, las iniciativas y los movimientos, denominados ecuménicos. Buscan tender puentes hacia la unidad entre las diversas iglesias cristianas. De igual manera potencian la apertura hacia otras religiones por medio del diálogo interreligioso.
Número y distribución
En la actualidad los cristianos representan un tercio de la población mundial y están presentes en todos los países del mundo. Son la religión mayoritaria en Europa, América y Oceanía. En África es también la religión mayoritaria, pero seguida muy de cerca por el islam. En Asia es una religión minoritaria.
La presencia de cristianos en el territorio de la Península Ibérica comenzó a ser relevante a partir del siglo III. Salvo una etapa de en torno a tres siglos (a partir del IX), en que el islam tuvo un impacto numérico muy destacado, el cristianismo ha sido la religión mayoritaria en la historia de España desde la cristianización del Imperio Romano. La forma de cristianismo mayoritaria en España es la católica.